Noviembre, 2022.
Momento del juicio en Mérida. Foto: Canal Extremadura
El juicio contra una veterinaria y once cazadores por la muerte de 40 galgos finalizó el miércoles 23 de noviembre en Mérida con la retirada de la acusación para ocho de los propietarios de los animales.
Para la veterinaria solicita dos años y ocho meses de prisión y multa de 10 meses por un delito de falsedad documental continuada y 15 meses de prisión y dos años y seis meses de inhabilitación para tenencia y oficio relacionado con animales por cada delito de maltrato animal.
El 25 de agosto de 2019 agentes del Seprona encontraron el cadáver de un galgo en un agujero en el terreno, restos óseos y un cuchillo. «Al pasar el lector de microchip el animal estaba identificado, la perrita en cuestión se llamaba Borrasca, de tres años de edad. Su finalidad, la de ser utilizada para cazar«, informa EuropaPress
Agentes del Seprona interrogaron al propietario que manifestó que llevó a la perra «a Sole, la veterinaria del pueblo y le dije que la perra no me vale, y me dijo, si no te vale, se le pone una inyección, se le da de baja y ya está«.
El SEPRONA habría comprobado que, «durante los años 2017, 2018 y 2019 la acusada dio de baja a 166 perros, de los cuales 41 apuntaban serios indicios de responder a la misma práctica que llevó a cabo con la galga Borrasca«, informó la asociación El Refugio en nota de prensa.
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